29.10.12 - FRANCISCO JIMÉNEZ | MÁLAGA
La futura plaza prevista sobre el aparcamiento subterráneo de la calle Camas va cobrando forma una vez que el mercado provisional que durante dos años albergó a los comerciantes de Atarazanas ya es historia. Tras el desmontaje de la construcción metálica concluido el pasado verano, la Gerencia Municipal de Urbanismo ya tiene perfilado el proyecto de reurbanización de la plaza Enrique García-Herrera que tanto tiempo llevan reclamando vecinos y comerciantes de la zona. Ya lo han conseguido, aunque aún tendrán que esperar, en el mejor de los casos, hasta mediados de 2013 para poder disfrutarla. Una vez que ya se ha dado a conocer el proyecto a los residentes, el Ayuntamiento tiene previsto sacar a concurso su ejecución en noviembre con el objetivo de que las obras puedan arrancar a comienzos de año, con una duración estimada de entre cinco y seis meses.
Tal y como estaba previsto, el diseño permitirá la recuperación de este espacio para uso ciudadano, además de incluir una reserva de suelo para la futura casa hermandad de las Reales Cofradías Fusionadas (con una altura de bajo más cuatro plantas) y para la ampliación del Museo de Artes y Costumbres Populares. Por lo demás, la plaza no estará demasiado cargada de elementos y mobiliario para que pueda ser compatible con el paso de los tronos, pero también para poder albergar la celebración de actividades diversas que puedan organizar tanto el Consistorio como otras entidades o colectivos. De hecho, este carácter multifuncional es la única pega que los vecinos han puesto al proyecto, ante el temor de que pueda ser ocupada la mayor parte de los fines de semana y, sobre todo, durante la Feria de Agosto.
La plaza, con un pavimento similar al del entorno, incluirá una zona de juegos infantiles -la única en el Centro Histórico- en la parte más próxima a calle Camas, junto al terreno reservado para la ampliación del museo (su construcción, que debe impulsarla Unicaja, no está prevista a corto plazo). Precisamente, en el acceso del edificio cultural se dispondrán una serie de bancos y naranjos.
Además, en el centro se ha diseñado una especie de pequeño bulevar formado por maceteros de 1,2 metros de alto por 4 de largo con enredaderas y flamboyanes -árboles de gran frondosidad, elegidos en detrimento de los ficus debido a que sus grandes raíces podrían dañar la cubierta del 'parking'- dispuestos en torno a las pérgolas que aportarán algo de sombra. Asimismo, para disimular los elementos visibles del aparcamiento (ascensores de salida, extractores y lucernarios) se instalarán unos paneles que se podrían adornar con imágenes sobre la historia de la zona, en la que hace años aparecieron restos arqueológicos, incluida parte de la muralla árabe de la ciudad. Por otra parte, para evitar la acumulación de agua de lluvia por el desnivel de la plaza, se va a crear un sistema que permitiría reutilizarla para el riego.